viernes, 10 de febrero de 2012
Africa - El Desierto del Sahara
Vemos una caravana de camellos cabalgando lentamente
sobre las dunas y les acompañamos. Son los Tuareg.
Viven desplazándose de un lugar a otro, son nómadas.
Visitan los zocos de las aldeas para comprar
o intercambiar sus productos.
Estos africanos tienen la piel blanca como nosotros.
Sólo que, de tanto Sol, se ponen morenos.
Buscan el Oasis, lugar donde brota agua, y acampan.
Montan rápidamente su jaima,
tienda de piel de cabra y suelo de alfombras de lana.
El sofocante calor del día calienta el aire que,
al moverse, provoca remolinos y tormentas de arena.
Los Tuareg se cubren la cabeza con un turbante y
la cara con tela muy fina para que la arena no
les dañe los ojos.
De noche hace mucho frío. Los adultos encienden el fuego
y, al calor, acuestan a los niños, mientras charlan
y toman el té un rato antes de dormir.
En los Oasis crecen palmeras que dan dátiles muy dulces.
Los niños van a la escuela del campamento.
Aprenden a dibujar en la arena y a jugar al dara
fichas de excrementos de camello.
Los hermanos mayores compiten en carreras de camellos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Gracias Feli.
ResponderEliminarMe has recordado que los debo retirar
o sustituirlos por los dibujos de los niños.
Otro libro que tengo en clase es "Mi viaje alrededor del Mundo"
de Geraldine Cosneau Imaginarium Círculo de Lectores