Por las tardes, en los momentos de descanso, no me entretiene la televisión, prefiero escuchar la radio. Me preparo un café, si puede ser de La
mejor. Sobre la mesa de la cocina extiendo alguno de los libros de Arte que andan por las estanterías de mi casa. Busco la imagen apropiada y leo y releo hasta encontrar la historia, anécdota del cuadro, biografía del artista y escribo un comentario, pensando en los alumnos y alumnas , sobretodo que les motive.
Aprovecho el paseo de ir a comprar el pan, para realizar las copias en color de las obras que en clase voy a trabajar.
Mi Cuaderno de Vincent Van Gogh
Es Vincent Van Gogh, un pintor holandés famoso por su oreja.
Nació en 1.853. Siempre se sintió incomprendido, fracasado.
Ya, de pequeño, apenas soportaba la presencia de los demás niños. Unicamente su hermano Theo, cuatro años menor, era el que podía estar a su lado.
De joven quería ser predicador como su padre, pero abandonó los estudios de Teología para dedicarse a ayudar a los mineros y a la gente más humilde.
Pobre, hambriento y sin paga, el que cayó enfermo fué él, pero de tristeza.
Theo le buscó un empleo en una Galería de Arte en París, donde visita los museos y descubre con pasión al grupo de los Impresionistas: los pintores de la luz.
"El merendero de Montmartre en París"
Se inicia a pintar como ellos, temas sencillos, gente corriente, los lugares con sus grises, sus nieblas, sus reflejos, sus gamas de color.
Pronto se cansó de la disciplina de un trabajo y se despidió, quedando al amparo de su hermano , quién le mandaba dinero y Vincent lo derrochaba en tabaco.
Se enamora de una joven y ésta le rechaza, por lo que su carácter impulsivo se vuelve violento.
Deciden viajar al Sur buscando un lugar luminoso que le animara un poco:
Arlés.
La luz del Sol y la variedad de las flores del campo cautivaron a Vincent. Alquiló una casa amarilla con ventanas verdes. Se pasaba horas y horas pintando: su humilde casa, lirios, girasoles, árboles frutales, trigales.
Observa su habitación: muebles sencillos,
la silla de enea, las paredes color lila decoradas con sus cuadros, la cama amarillo anaranjado y la ventana verde. Quería transmitir el sosiego que sentía.
Vincent se encontraba ilusionado y feliz en Arlés.
Cada alumno pinta su habitación.
Por aquel tiempo, comenzaron a utilizarse las farolas de gas en las calles. En las noches claras y cálidas sacaba su caballete, sus óleos y su silla y plasmaba la noche, como ningún pintor hasta el momento. En la obra
"Frente al café" refleja el contraste luminoso del toldo de la terraza y el lado oscuro de la calle. Las estrellas parecen explotar en el cielo, como los cohetes en las ferias. Una maravilla.
Los vecinos le decían: "El loco del pelo rojo", pero no conseguía vender ni un cuadro.
Los girasoles
Escribiría a su querido hermano: "Yo no tengo la culpa de que mis cuadros no se vendan, pero llegará el día en que la gente reconozca que valen más que el dinero que costaron los colores para pintarlos".
A finales del verano de 1.888 invitó a un pintor que conoció en París, Paul Gauguin, a pasar una temporada con él y , así, fundar una Asociación de Artistas, que expresaban su estado de ánimo en sus obras.
Paul retrata a Vincent pintando los girasoles.
Paul poseía una personalidad fuerte y cautivadora, por lo que no se dejó llevar por los contínuos cambios de humor de Vincent. Sufría al ver cómo malgastaba el dinero que su hermano Theo le mandaba con tanto esfuerzo. También le recriminaba su mal carácter.
Pronto dejaron de confiar el uno en el otro.
Una noche antes de la Navidad, Paul se fué de paseo dejando sólo a Vincent quién, en una crisis de ansiedad, se cortó una oreja con la cuchilla de afeitarse, la envolvió en una hoja de periódico y se la llevó a una amiga.
"Autorretrato con la oreja vendada" Enero 1.889
Cuando Paul regresa, le encuentra echado sobre la cama muy débil. Llama urgentemente a Theo y le ingresan en un hospital cercano, en Saint Remy, donde permanece casi un año.
La silla de Vincent - La silla de Paul
Observad las sillas, son diferentes como sus dueños. Están vacías, los amigos ya no se sientan a charlar horas y horas. La amistad se ha roto.
Paul Gauguin se marchó de Arles, muy muy lejos, a las Islas Vírgenes en el Océano Pacífico, de donde regresó con unos cuadros preciosos.
Mientras a Vincent, el director del hospital le dejaba pintar lo que veía desde la ventana: el patio, los trigales.
Nos ofrece la
"Noche estrellada": quietud en el pueblecito, movimiento en el cielo; la Luna naranja parece el Sol, los cipreses arden como las llamas. Vincent percibe dentro de sí un sufrimiento que quisiera que se apagara, que se consumiera como una hoguera, pero no.
Theo decidió seguir los consejos de Pisarro, amigo pintor, y traerse a su hermano más cerca de París, a
Auvers a los cuidados del Doctor Gachet, bohemio y buena persona. Vincent le retrató preocupado, pues no intuyó curación posible para él.
Vincent se marcha, ya tarde, a un trigal y se dispara un tiro en el pecho. Con paso vacilante llega a la pensión. Muere dos días más tarde en brazos de su buen hermano Theo, quien nunca le abandonó. Era el verano de 1.890.
-------------------
Me impresionó, nunca mejor dicho, el interés de los niños por Van Gogh y por lo que le pasaba: Como es posible que una persona tan triste pudiera crear una obra tan preciosa, que se cortara la oreja con la cuchilla de afeitar, la labor de su hermano Theo que le mantenía porque sabía que estaba enfermo, su amistad y sus discusiones con Paul, la preocupación del doctor que no podía curarle.
Cuando escucho en la radio o leo en el periódico el dilema de las actividades de estudio alternativo o de la Educación para la Ciudadanía me indigno, porque los profesores conscientes de nuestra tarea, transmitimos contínuamente valores importantísimos para la buena formación y el desarrollo físico y social de nuestros alumnos.